Con esto del verano y de las olas de calor, muchos han decidido no hacer deporte. El hecho de no poder continuar con la rutina que mantenían anteriormente les bloquea dando por sentado que no se puede realizar ningún tipo de actividad deportiva.
Actuar de esta manera no es la más idónea, si bien continuar con actividades deportivas de cierta intensidad requiere tener cuidado ante la aparición de situaciones complejas como puede ser un golpe de calor.
Un golpe de calor es una situación corporal extrema en el que nuestro organismo es incapaz de enfriarse por sí mismo ante temperaturas elevadas y mantener nuestra temperatura corporal, de modo que supone un aumento radical de la temperatura corporal, acorde a la temperatura ambiente, incluso a más de 40º C, situación que no sucede con la insolación por ejemplo. Hay que tener en cuenta que el golpe de calor es una urgencia médica y por lo tanto requiere de atención especializada.
El golpe de calor es una urgencia médica que se da a menudo durante el verano, y para prevenirlo y así no pasar un mal trago, es conveniente atender a los signos y síntomas pricipales que se plantean a continuación. Además de la excesiva temperatura corporal, los síntomas pueden ser:
- Piel seca y caliente.
- Aturdimiento con o sin demayo.
- Náuseas y vómitos.
- Trastornos motores y falta ostensible de coordinación.
- Pulso rápido y fuerte.
Ante un cuadro de golpe de calor es necesario llamar rápidamente a los servicios médicos de urgencias y mientras estos se personan:
- Trasladar a la persona a un lugar seco y fresco.
Envolver a la persona con toallas húmedas o colocar bolsas de hielo en las áreas de mucha circulación sanguínea, como son las axilas, ingles y cabeza.- Mantener semisentada a la persona.
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